12 de diciembre: Día de la Salud Universal
Este día tiene la finalidad de aumentar la concientización respecto de la necesidad de contar con sistemas de salud sólidos y resilientes, y una cobertura sanitaria universal con múltiples partes interesadas asociadas. Esto significa que todos los individuos tengan acceso, sin discriminación alguna, a servicios integrales de calidad, cuándo y dónde lo necesiten.
En 2012, la Asamblea General de las Naciones Unidas aprobó una resolución en la que instaba a los países a acelerar los procesos hacia la consecución de la Cobertura Sanitaria Universal (CSU), una idea dirigida para que todas las personas, en cualquier lugar, tengan acceso a servicios de salud de calidad y asequibles, como una prioridad para el desarrollo internacional. Por ello, el 12 de diciembre de 2017, las Naciones Unidas proclamó el Día Internacional de la Cobertura Sanitaria Universal (Día de la CSU).
En todo el mundo, algunos grupos tienen peores condiciones de vivienda y educación y menos oportunidades de empleo, por lo que disminuye su acceso a entornos seguros, agua, alimentación y servicios de salud, con la consiguiente vulnerabilidad, mayor incidencia de enfermedades, muertes prematuras y pérdida de calidad de vida. Por este motivo, es de suma importancia que existan políticas públicas que monitoreen las desigualdades en materia de salud y garanticen que todas las personas puedan acceder a servicios de salud de calidad cuando y donde los necesiten.
“Hemos atravesado años muy difíciles marcados por la pandemia de COVID-19, lo que llevó a que muchas personas descuidaran algunos hábitos que son necesarios para llevar una vida saludable”, describe la Dra. Valeria El Haj, Directora Médica Nacional de OSPEDYC. Y agrega que: “La salud es un estado completo de bienestar físico, mental y social. La salud no sólo significa la ausencia de afecciones o enfermedades. Por eso, el desafío es mantener un equilibrio entre estos aspectos”.
Características más importantes necesarias para cuidar nuestra salud:
● Mantener una alimentación sana, equilibrada y adecuada. Una alimentación saludable se basa en recibir las 3 comidas y 2 refrigerios al día, los nutrientes esenciales y la energía que necesitamos para mantener nuestra vitalidad.
● Tomar al menos 2 litros de agua al día.
● Practicar ejercicio físico y evitar el sedentarismo. Realizar ejercicios es fundamental para llevar un estilo de vida saludable. Practicar 30 minutos diarios de ejercicios durante 5 días a la semana, o 1 hora de ejercicios 3 veces por semana nos ayudará a mantener un peso adecuado y seremos más felices porque liberamos endorfinas, las mismas que funcionan como analgésico natural y reducen el sentimiento de dolor así como la ansiedad y el estrés.
● Dormir bien. Dormir entre 7 y 9 horas aumenta los beneficios de tener un estilo de vida saludable y puede disminuir el riesgo de desarrollar enfermedades cardiovasculares.
● Reducir el estrés. Dormir adecuadamente y la actividad física son fundamentales para reducir los niveles de estrés, lo que además se verá reflejado en la interacción con el entorno en el que nos desempeñamos.
● Tener una higiene adecuada. El concepto de higiene no sólo se refiere al aseo y limpieza del cuerpo, sino también al ámbito doméstico y mantener nuestro entorno limpio y ordenado.
● Evitar el consumo de tabaco y alcohol. Estas sustancias inciden de forma negativa en la salud.
● Tener bienestar emocional. Cuidar la salud mental es tan importante como cuidar la salud física. En todas las etapas de la vida, el bienestar emocional, psíquico y social influye en cómo piensan, sienten y actúan las personas.
La Directora Médica Nacional de OSPEDYC remarca que: “Tener una vida saludable aumenta la esperanza de vida de las personas, pero también la calidad en los años que viva. Y agrega que: “No existe un único estilo de vida saludable por lo que cada persona puede elegir cómo llevarlo a cabo”.
Comments